¿UNA ALTERNATIVA AL DESARROLLO?
El Faro, ubicado en Medellín, la segunda ciudad más grande de Colombia, es un barrio autoconstruido por sus habitantes en un territorio de frontera urbano rural. Aún no ha sido reconocido oficialmente dentro del perímetro urbano, y por lo tanto parte de su población está excluida del sistema de prestación de servicios públicos, incluido el suministro de agua. Sin embargo, sus habitantes, muchos de los cuales provienen de diversas partes del país al haber sido desplazados forzadamente por causa del conflicto armado interno, trabajan articulados con la Mesa Interbarrial de Desconectados de la ciudad para garantizar su derecho al agua a partir de prácticas cotidianas, organizativas y comunitarias que entremezclan estrategias de reivindicación y de autonomía.

El objetivo central de la investigación es comprender el potencial alternativo de estas prácticas de derecho al agua, frente al modelo de desarrollo expresado en las políticas del agua vigentes en la actualidad. Inspirada por los principios de la Investigación Acción Participación en este trabajo se adoptó la modalidad de investigación comprometida a partir de la inmersión política de la investigadora en el proceso estudiado. La recolección de información estuvo orientada principalmente por técnicas metodológicas de la etnografía y los hallazgos fueron analizados mediante procesos de sistematización de datos, triangulación de fuentes y confrontación con los fundamentos teóricos que orientaron el estudio.
De este modo la reflexión propuesta supera los binarismos excluyentes en la teoría social. En primer lugar, reconoce la relación interdependiente y bidireccional entre la sociedad y la naturaleza para permitir la emergencia de nuevas maneras de entender el agua. En segundo lugar, desafía la monocultura del poder para revelar la coexistencia de múltiples sistemas normativos que interactúan con el derecho estatal y exigen nuevas formas de comprender el derecho. Y en tercer lugar, permite la expresión de la identidad mestiza de quien habita en la frontera y con sus prácticas cuestiona la disyuntiva del proyecto decolonial que sólo concibe una posibilidad entre modernidad y tradición. Con estos elementos, la investigación propone un diálogo entre el caso de estudio y diversos horizontes de pensamiento buscando contribuir a los estudios críticos del desarrollo, a los estudios críticos del derecho y a la ecología política.
